INFANCIA — del nacimiento hasta los dos años — Clase de Cuna.
• El descubrimiento es la palabra clave.
• En lo físico, es un actor.
• En lo mental, es un descubridor.
• En lo religioso, es un imitador.
NIÑEZ TEMPRANA — de los tres a los cinco años — Párvulos.
• La receptividad es la palabra clave.
• En lo físico, le gusta jugar.
• En lo mental, le gusta hacer preguntas.
• En lo religioso, es un creyente.
NIÑEZ MEDIA — de los seis a los ocho años — Principiantes.
• La actividad es la palabra clave.
• En lo físico, mantiene una actividad enérgica.
• En lo mental, es un observador.
• En lo religioso, discrimina.
NIÑEZ POSTERIOR — de los nueve a los once años — Primarios.
• La energía es la palabra clave.
• En lo físico, es un explorador.
• En lo mental, es un investigador.
• En lo social, es un bandido.
• En lo espiritual, es adorador, y está abierto a la asistencia en la evangelización.
JUVENTUD TEMPRANA — de los doce a los catorce años — Intermedios.
• La transición es la palabra clave. No son niños ni mayores.
• En lo físico, se manifiestan tremendos cambios en lo físico, en los ideales en las metas y en la disposición de carácter.
• En lo mental, es un crítico.
• En lo social, ansía el compañerismo.
• En lo espiritual, los doce años representan la “cima” del interés espiritual y buena disposición para el nuevo nacimiento. Después de los doce años, al parecer disminuye el interés por lo espiritual.
JUVENTUD MEDIANA — de los quince a los diecisiete años — Jóvenes.
• La aspiración es la palabra clave.
• En lo físico, se caracteriza por la búsqueda del éxito.
• En lo mental, se caracteriza por su excesiva confianza.
• En lo social, se caracteriza por la búsqueda de amistades. (Las lecciones se forman fácilmente).
• En lo espiritual, se caracteriza por su confianza en intrepidez.
MADUREZ TEMPRANA — de los veinticinco a los treinticinco años — Edad de la aplicación. Características generales.
MADUREZ MEDIA — de los treinta y cinco a los sesenta y cinco años — La edad del logro o del éxito.
MADUREZ TARDIA — de los sesenta y cinco años en adelante — La edad de la meditación.