INTERÉS: Si el alumno tiene interés aprenderá. Un maestro alerta notará si el alumno lo tiene o no.
PARTICIPACIÓN: Es una forma excelente para aprender. Cuidado del alumno que solo ‘saca a salir’.
ASISTENCIA: El alumno quien asista voluntariamente aprenderá. La razón por el cual son ausentes indica algo.
ACTIVIDAD: Cuando practican lo que usted enseña, están aprendiendo. Ejemplo: Si la lección sobre la gran comisión trae nuevos, hay éxito. Si reciben a los nuevos, su clase sobre ‘bondad’ ha tenido resultados. Después de enseñar sobre el quinto mandamiento, los padres dicen que muestra más respeto, hay progreso.
FLEXIBILIDAD: Hay muchas maneras para enseñar. Un maestro utiliza diferentes métodos para diferentes fines. Cuando el alumno siempre sabe exactamente lo que usted hará, no es bueno. Sorpresas son buenas!
ESPIRITU PRÁCTICO: Jesús fue real, viviendo, actual. Su Espíritu está con nosotros. La Biblia es su palabra y es poderosa. La iglesia está y continuará. Debemos predicar y enseñar la realidad de momento — traducir lo antiguo en hoy día. La vida es ahora.
PROPÓSITO: Cuando está Buena la enseñanza, ambos el maestro y el alumno saben lo que hacen y el por qué.
RESOLVER PROBLEMAS: “Esta lección me ayudó” es un testimonio a la Buena enseñanza. O el adulto que dice “Cuando aprendo más, me da ganas de seguir adelante” es bueno. Cada persona tiene problemas. Dios y su palabra tiene todas las respuestas.
COMPORTAMIENTO: El mejor que enseña el maestro, el mejor que el alumno conoce la voluntad de Dios y mejor lo puede practicar. Cuando el alumno no quiere drogas, fumar, y otros hábitos dañinos, sucede en resistir la tentación, practica la bondad y el amor, ayuda a otros, y fielmente asista los cultos, hay evidencia que la enseñanza es Buena.
